La clasificación en clubes A y doble AA en el modelo económico «Unidos por el fÚtbol» fracciona al balompié boliviano en la futura venta de los derechos de televisión
En la primera reunión del presidente de Bolívar, Marcelo Claure, con los 14 clubes profesionales (antes se habría reunido con cinco), todos o casi todos daban por hecho que el plan «Unidos por el Fútbol» era la mejor forma de vender los derechos de televisión.
La inicial oferta de los 100 millones de dólares por diez años y la pronta entrega de 10 millones para salvar la economía de pandemia hizo brillar los ojos de los clubes que aún no pagan a sus jugadores saldos de sueldos de la temporada 2019 y de la gestión 2020.
Claure ofreció una magistral presentación en el juego o el negocio millonario del fútbol en la televisión. Todos auguraban que el anuncio del presidente Claure estaba realmente dispuesto a favorecer por igual a los 14 clubes.
En la segunda presentación del titular celeste, que hoy radica en Estados Unidos, la oferta subió a 104 millones, y se advirtió que el plan no era más que una vía para obtener mejores condiciones para su club (Bolívar) y así lo confirmó la distribución porcentual.
Se trataba únicamente de una estrategia previa para sentar a la actual empresa a negociar y obtener una mejora desde 2021.
La propuesta no era del todo creíble y sólo buscaba meter presión antes de llegar a un nuevo acuerdo que será inevitable. Querían pinchar la burbuja. El discurso era aparentemente el mismo en los 6 clubes que apoyaban al ideólogo del Modelo de Empresa, sumando a ser socios, pero con distintos matices.
El tema es complejo. La segunda exposición distanció a los 14 clubes, los puso en veredas opuestas tras la comedida exposición del presidente de Blooming, que en el fondo hizo público la idea original de Claure y los seis clubes. Unos en categoría AA y los demás en la categoría A. Esto lo hizo un flaco favor al «Caballo de Troya» de Claure, que tendría la mira puesta para ser el sucesor de César Salinas en la FBF, ya que los clasificados como equipos A empiezan a temer el impacto del negocio.
La Federación Boliviana de Fútbol, única rectora de este deporte en el país. anuló la licitación e intento buscar un careo del Plan de Claure y Sport TV Rigths, actual poseedora de los derechos. A la tercera cita virtual asistieron los llamados club A, mientras que los clubes doble A se borraron en una clara revancha, pues los A no acudieron a la segunda presentación. Habría sido bueno tenerlos frente a frente y seguro ganaba el fútbol.
Hoy se nota un debilitamiento en el proyecto “Unidos por el Fútbol”, y Sport TV Rigths que explicó su potenciamiento técnico y experiencia en el rubro se fortificó al ser llano al diálogo, el acuerdo y pese a la cláusula de preferencia a su favor, dejó entrever que mejoraría la parte económica si se revalida su permanencia por los siguientes cuatro años.
El resultado ha sido una frenética guerra de cálculos económicos que todos los clubes han lanzado y que ha puesto a prueba los resortes de su rentabilidad.
Blooming, dispuesto a lavar la cara, dejó entrever que si existe oferta mayor a la de Claure daría su apoyo tras analizar los pros y los contras y que beneficien al interés colectivo y no el individual; de no quedar satisfecha su expectativa, seguiría el camino del club Bolívar, que en los últimos cuatro años vendió por su cuenta la localía.
Comercializar individualmente los derechos de algunos clubes, al parecer, no marcharía tras la palabra oficial de entes internacionales rectores del fútbol que dan potestad a las federaciones nacionales en ese capítulo.
Al parecer está echada la decisión. Se licita o invita, y la entrega de esos derechos será solo por cuatro años y con un anticipo del 10 o más por ciento. Los interesados podrán volver a exponer su propuesta económica.
“Los clubes necesitan dinero fresco y estimo que, si operativizamos pronto, ya sea por licitación o invitación directa, los clubes van a tener un anticipo”, dijo el titular federativo Salinas.
Sobre la propuesta de Claure, agregó que no es una “causa noble” porque el proponente se quedaría con el 67% de las acciones y será el dueño absoluto sobre los derechos de Tv. en los siguientes diez años.
A todos nos gustaría que hubiera menos agresividad y poder mirar a largo plazo con un poco más de aire en los pulmones y más serenidad. Lo cierto es que hasta hoy ya ganó el fútbol con una u otra de las propuestas y esto debería convocar a un trabajo unido en año de eliminatoria mundialista.