Una vida entre el periodismo y la docencia.
Si seguías el deporte desde los años 70, recordarás la timbrada voz de Rolando Gamarra Urizar. Surgió en radio El Sol y luego Nacional donde registró su identidad.
Había llegado a Cochabamba desde su natal Chuquisaca en 1972 y su amistad con René Nelson Villarroel le permitió integrar el equipo deportivo Performance donde también estaban Renán López y el locutor comercial Tito Hoz de Vila (+).
«Don Rolito» para muchos dirigentes, deportistas y colegas, combinaba su tarea de docente de secundaria con el periodismo.
Gamarra Urizar estuvo vinculado a muchos medios, siempre fue fiel. Siguió sobre todo el fútbol y con propiedad habla del mismo hoy, donde se advierten pocos o ningún cambio de mejoría.
― ¿Qué espera de nuestra selección en la venidera eliminatoria?
― En el deporte y de manera especial en el fútbol, todo es ente impredecible, pero hay selecciones que trabajan de manera responsable, seria y en base a una planificación. Lamentablemente esto no ocurre con nuestra Selección, se deben vencer barreras internas, Fabol, por una parte, los mismos dirigentes y hasta los futbolistas, que primero piensan en el bolsillo antes que en el honor de defender la divisa nacional.
― ¿Opinión sobre César Farías?
― Un profesional que intenta realizar cambios, especialmente en la renovación de valores tan escaso en nuestro fútbol, muy hormonal, con reacciones fuera de lugar, tuvo más de un entredicho y hasta cruces de palabras y hechos con algunos colegas, actitudes que desvalorizan su calidad humana.
― ¿La renuncia de todos los afiliados de Fabol a la selección?
― La majadería de siempre, falta de madurez, consideran que le hacen un favor a la Selección sin darse cuenta que la Selección Nacional los pone en la vitrina más grande importante del fútbol, no pasó esto con Erwin Sánchez, Milton Melgar y muchos otros.
Además tratan de sacar el máximo de provecho económico llegando hasta al límite del chantaje.
― ¿Y de Fabol?
― Organización que tuvo buenos principios al defender el derecho de los futbolistas, frente al engaño de malos dirigentes que no cumplían los compromisos salariales y laborales, lamentablemente esta tarea distorsiona su labor, al extremo de perder su horizonte y convertirse en un ente sindicalista anárquico.
Tras muchos años de servicio en la prensa oral y escrita, Rolando disfruta de su familia. Teresa Flores, su esposa y sus hijos Boris, Fabiola, Claudia y Marcelo, todos brillantes profesionales, disfrutan de este nuevo tiempo del «Profe Gamarra».
― ¿Rolando, que hace en este tiempo de cuarentena?
― La lectura que es importante para seguir acumulando conocimientos, escribir sobre temas deportivos, políticos y sociales generados en este tiempo de pandemia.
― ¿Qué opina, muchos colegas se quedaron sin trabajo por este mal?
Es triste, porque detrás de cada colega hay una familia, las instituciones que nos cobijan deben gestionar ante los ministerios de Economía y Trabajo para que conozcan esta realidad y no se ignore, como habitualmente ocurre con los medios de comunicación.
― ¿Cuántos años estuvo en el periodismo deportivo?
― Si mis cálculos no van mal, 52 años de trabajo activo y continuo. Me vine de radio Loyola de Sucre a El Sol y Nacional.
― ¿Qué es lo que más añora?
― Esta pasión del periodismo que es un embrujo que cautiva, como la selva, a donde es fácil entrar y de donde es difícil salir.
― ¿Alguien siguió los pasos suyos?
― Claudia, la tercera de mis hijos, es comunicadora, egresó de la Universidad Católica.
― ¿Qué es lo que más extraña?
― Bueno, al principio y luego de mi jubilación, estar en esa dinámica de trabajo, eran 24 horas permanentes de trabajo, poco a poco aquello queda como un bonito recuerdo, también los amigos con los cuales se tiene una estrecha amistad.
― ¿En que medios escritos trabajó?
― Opinión, durante 30 años y corresponsal del Diario El Deber de Santa Cruz por el lapso de 15 anos
― ¿Qué opinión le merece las redes sociales en este tiempo?
― Interesantes, aunque desde hace algún tiempo atrás malos usuarios distorsionan esta función, razón por la cual el lector o usuario de las mismas, debe realizar una cuidadosa selección para no caer en imprecisiones. A las redes sociales debemos tomar en cuenta con un inventario.
― ¿Cree usted que desparecerán los medios escritos?
― No creo, pero si considero que deben ser más analíticos y con más novedades que la Radio y la TV que superan con la inmediatez de la noticia.
― ¿Alejado ya de los estadios, como ve nuestro fútbol?
― Es cierto, alejado de los estadios, y no en el balcón de la indiferencia, al contrario, siguiendo de cerca con gran preocupación, porque no existe la promoción de valores de jerarquía, esto lleva a pensar en las asociaciones que son la raíz, donde se trabaja poco o nada y sus torneos son más domésticos, que competitivos.
― ¿Cómo califica la permanente guerra mediática de los dirigentes?
― Cuando no existe la capacidad de diálogo se recurre estas actitudes, que solo desnudan la limitación mental de sus protagonistas.
― ¿A quienes recuerda?
― Hay varios hombres y nombres para mencionar, por ejemplo, a don Rafael Mendoza Castellón, Mario Mercado Vaca Guzmán, Rafael Paz, Alfredo Salazar Rivas y Alberto Alem.
― ¿Si habría que elegir el mejor dirigente de su tiempo, a quien elegiría?
― A nivel Nacional a Rafael Mendoza que supo dirigir y hacer mucho por The Strongest, en Cochabamba, Alfredo Salazar que hizo historia con Wilstermann.
― Rolando, ¿cuantos años estuvo ligado al periodismo deportivo?
― Algo más de 50 años, muy joven comencé en Radio Loyola de Sucre, cuando decido radicar en Cochabamba en 1973, trabajé en Radio El Sol, Radio Cosmos, Radio Nacional y Audia.
― ¿Es usted hincha del Tigre, ¿no?
― Fanático del fútbol, de todas aquellas instituciones que ingresan a los campeonatos a competir y no solo hacer número. Una cierta preferencia por The Strongest, y el gran Aurora, sin perder mi perspectiva de periodista.
Quedo agradecido a dirigentes, técnicos, jugadores en todas las disciplinas por haber facilitado mi trabajo, que lo hice con mucha pasión y amor. Mil gracias de corazón.