Blooming de Santa Cruz como muchos clubes del fútbol profesional boliviano, se sume mucho más en una crisis económica que hace de un pronto futuro muy difícil, complicado e insalvable.
Jean Carla Terrazas, ex vicepresidente de la academia cruceña, considera que mientras no se ordene la casa, no se transparente el manejo económico y no exista mayor “Tapandeque”, será difícil salvar de esta situación no solo al club cruceño, sino a muchos otros clubes del país, donde algunos dirigentes viven del fútbol y no para el fútbol.
La empresaria Terrazas renunció a la vicepresidencia de Blooming, cansada de las irregularidades que sucedían a vista y paciencia de la dirigencia y por ser apartada por la directiva al momento de tomar decisiones respecto a la vida institucional de los celestes. “Mi presencia les estorbaba, porque no acepté ningún tipo de corrupción, vi muchas cosas que se manejaban mal y bueno, me hicieron difícil la permanencia”.
Ella está segura de que todos los clubes son presidencialistas, donde ellos solos, deciden como se maneja la institución, el resto es relleno y subordinado. “No, yo llegué a Blooming a trabajar y no a subordinarme. Hice una auditoria donde se establecieron malos manejos, pero no podía publicarlo sino autorizaba el presidente y como lo hizo, nadie sabe de como está la economía de la institución”.
La también brillante empresaria cruceña, presentó su renuncia irrevocable a dos meses de que Sebastián Peña asumiera la presidencia bajo la consigna de la transparencia. “No, para nada. No hay transparencia o no te dejan transparentar, por ejemplo, hay préstamos realizados a dirigentes y había que cobrar, pero no podía hacerlo yo sin la nota firmada por el presidente, y eso tampoco se hizo”.
Frustrada, decepcionada y atada de manos, Jean Carla decidió dar un paso al costado no sin antes de pedir a los socios, que exijan informes económicos periódicos de los ingresos y egresos de la institución. “Hay gente que ayuda, pero nadie sabe con cuanto y a donde van esos dineros. Yo y mi familia somos blooministas, queremos a la institución y la verdad, duele mucho lo que está pasando en este momento”.
El saliente Juan Jordán no presentó ningún tipo de informe económico, “y eso no esta bien. Uno debe pedir informe de como recibe el club y brindar otro informe de como deja la institución antes de irse.
A mucha insistencia, el directorio aceptó la renuncia de Fernando Cuéllar (uno de los colaboradores del expresidente Jordán) a la gerencia del club, pero ese funcionario seguía ejerciendo sus labores e incluso cobrando de esponsors a nombre de Blooming.
Terrazas salió por la puerta grande y con las manos limpias, además que no sintió apoyo del resto del directorio para generar cambios en el manejo administrativo a la que está acostumbraba Terrazas.
Pignoración
La señora Terrazas a poco de ingresar a la directiva y para salvar la difícil situación en el club, prestó 80 mil dólares para el pago de sueldos de una planilla que alcanza los 120 mil dólares. “Me asesoré y para cuidar mi dinero hice una pignoración con el visto bueno de la Federación Boliviana de Fútbol, ojo, fue un préstamo sin intereses”.
Pasado los meses, Blooming logró el apoyo federativo y dejaron sin validez ese documento de la pignoración. “Yo hablé con el presidente Costa, pero me sorprendió y dolió la decisión. Presté ese dinero y no lo voy a perder, esperará que me lo devuelvan, amo a Blooming, pero no les regalaré mi dinero”.
Jean Carla se mostró dolida por la actitud federativa, “ya que trabajé con ellos un año y los conozco”.
Terrazas, sostiene que la FBF debe exigir a sus clubes, la presentación de auditorias y balances anuales. “En su momento denuncié y expuse irregularidades en Blooming. No podía prestare a ilegalidades, lo que quería era transparentar el manejo del club”.
Malos manejos
Terrazas denunció que los sueldos a los futbolistas se pagan en efectivo y no por el banco o la emisión de cheques o depósitos.
Que hay contratos firmados con desventaja para el club. “Si el club incumple con el pago de una cuota, pierde todo lo que antes pago, y reinicia de cero el pago de ese contrato. Eso está muy mal, son contratos lesivos ya que no tenían pies ni cabeza”.
La ex vice presidenta considera que su salida fue oportuna para no comprometerse con la recepción de dineros cuestionados que vinieron de otros lados.
También denunció que se simularon préstamos de los mismos dirigentes o muy allegados al club, pero préstamos con intereses. “Esos dineros eran pagados porque había intereses, en cambio yo prestaba sin intereses porque amo al club”.
No hay cuentas y se resisten al cambio con la tecnología, creo que les interesa más estar como están, ya que cuando esta desordenada es más fácil y se cofunde ser amigos, en lo ilegal. se apoya, una cosa es ser amigos y no cómplices.
Tarea pendiente
Jean Carla no descarta volver a Blooming en un tiempo, pero con un equipo que la apoye para transparentar la institución, ya que hoy no le dejaron hacer nada. “No, no puedo volver sola, quiero un equipo que me apoye en crear una buena y mejor administración que repercuta en los resultados, en los futbolistas, en tener una buena cancha y sueldos al día”.
Ella es bloominista de toda la vida, socia activa junto a sus hijos. “Estamos firmes con el club, sigo al equipo y espero mejores días, eso si, sostengo que, si la cabeza está mal, lo demás también estará mal”.