El portero argentino Carlos Emanuel Franco volvió a Oruro y esta vez para defender el pórtico del equipo de la V azulada, que hoy tiene el nombre de Gualberto Villarroel San José, y jugar la Copa Simón Bolívar.
«Volví después de mucho tiempo, estamos acá, porque Dios nos envió a este camino, y tengo fe que será de confianza, que será de gloria», dice el hombre de fe, que recién debutó en el segundo partido.
El primero lo vio desde la tribuna, sufriendo y luego festejando con el público que está volviendo al estadio «Bermúdez», testigo de grandes momentos vividos con el equipo «santo».
El popular «Pirú», muy mimado por el aficionado, se animo y volvió a Oruro animado por el técnico Eduardo Villegas. «El profe me motiva y me gusta mucho su manera de trabajar, es una de las razones de mi retorno a la ciudad».
La primera vez que llegó a Bolivia fue en 2016 para defender al «santo», luego tuvo expediciones internacionales y en el 20 defendió el arco de Real Santa Cruz. «El 2018 fue mi mejor momento, un año antes hubo muchas piñas, diferencia con la dirigencia».
El Pirú, recuerda que con Zamora y Salvatierra, había duelo para ser titular. «Me gané la titularidad trabajando mucho, recuerdo que con el DT Néstor Clausen hice buenos partidos, y en 2018 con Villegas fue mi mejor momento, llegué a la cúspide».
Volvió para triunfar. Se emocionó al ver mucha gente en el estadio en el debut, tiene confianza de llegar a la división profesional. «Villegas saca lo mejor que tiene el jugador, es muy profesional. Día a día si estas bien jugarás, y sino te dice que esta mal. A mi me potenció mucho».
Tras el descenso de San José en 2018, se fue para jugar en Ecuador y en Argentina.
Fue el único futbolista que comprendiendo la situación del descendido, renunció a la deuda que tenía el directorio de Wilson Martínez para con él. «Sí, comprendí el difícil momento. Sabes, a los 22 años cometes un error, si a los 30 repites lo mismo, es que no aprendiste nada. Recuerdo a mi papá que me reflexionaba así, había que remar y por eso volví a Oruro».
Pirú está agradecido a Oruro, debido a que su familia tiene casa y comida. «Visualizaba de volver, pero no en esta situación, llegué con una mano adelante y mi primer hijo. Mis hijos son bolivianos y pronto quiero ser boliviano, sueño poder jugar en la selección».
El portero llama a la unidad de los orureños, ya que unidos se puede volver a posesionar al club en la división profesional. «Cambió el nombre, esto esa político, la camiseta y el estadio son lo mismo. Espero que la dirigencia se comporte mejor. No hay rencor ni remordimiento, pues cada uno tiene sus batallas, que nos ayuden a pelear para darle otra copa».
Franco se emociona y afirma: «soy sincero, cuando vine me dije: me quedo aquí, me siento cómodo, éste es mi lugar. Saben, voy a mi país y no me conoce nadie. Aquí voy a la tienda y todos me hablan. Se que cometí errores, asimilo, pero Oruro me dio estabilidad. Aquí esta la estabilidad de mi familia».
COPA
Tras los dos primeros triunfos en la Copa Bolívar, Pirú sostiene que «todos van a querer ganarnos, esperamos con ansias este torneo, así que vamos a luchar contra todos y demostrar que somos los mejores».
Franco insiste en que el grupo está unido, que se hizo buena pretemporada y muy fortalecido. «Vamos bien en lo físico, siempre habrá críticas, pero tenemos equipos y medio, tendremos tres en cada puesto».
Los «santos» ya sumaron dos triunfos, «lo que viene es algo grande, logre cosas buenas, siento que tengo mucho para dar y eso vendrá fecha a fecha en el torneo».
GV San José comenzó con buen pie, el avance en el torneo dependerá mucho del apoyo del público, el aliento desde las tribunas y la entrega de los jugadores en el campo de juego.
«Prometo dejar todo de mi en el campo, porque está en mis batalla».