Un balance y análisis del primer mes de gestión de Fernando Costa a la cabeza de la Federación Boliviana de Fútbol. En medio de la pandemia del covid-19 volvió el torneo oficial y se acortan las distancias divisorias.
POR ROBERTA PADUA
EL 14 DE DICIEMBRE, Fernando Costa cumplió el primer mes de trabajo al frente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) con un balance positivo, tras superar la fuerte tormenta que sacudió a nuestro fútbol tras la muerte de César Salinas y la llegada de la maldita pandemia del covid-19.
Las cuestionadas elecciones realizadas en La Paz y la elección de Costa, calmaron las aguas, que se vieron apaciguadas con el oficial reconocimiento de la CONME-BOL.
Y bueno, Costa como buena señal de lo prometido en la campaña, comenzará con la realización de una auditoría para establecer el manejo económico en la pasada administración.
Aunque se mantiene distancia social por el posible rebrote del covid-19, Costa decidió unir a los protagonistas del fútbol boliviano y apuntar a mejores días.
Otro valioso paso fue el haber vuelto a la actividad con el torneo relámpago del Apertura 2020, que coronará un campeón al 31 de diciembre y los otros siete clubes que lo acompañarán en los torneos internacionales de Copa Libertadores y Sudamericana.
La nueva administración, que completará la gestión del fallecido Salinas Sinka, también dio señales de unidad al posesionar al directo-rio de la Asociación Boliviana de Fútbol Femenino ABFF, marcando el inicio del fortalecimiento institucional que se verá reflejado en el crecimiento y desarrollo de esta categoría en el país.
El presidente Costa aseguró que se procederá de la misma forma con la institución que agrupa a los árbitros. «No se porque se tardó tanto en este proceso, deben participar todos los actores del fútbol», sostuvo.
Finalmente, tras conocer que no hay ningún tipo de cuestionamiento sobre el trabajo del seleccionador César Farías, adelantó que tras una reunión con el cuerpo técnico se establecerá un calendario para 2021 con las divisiones menores, femenina y absoluta y «hacer más competitivos a nuestros selecciones de la Verde».