Por Erwin Quispe Perca
Brenda Laime JALIL consiguió un puesto histórico dentro de sus logros profesionales en el ráquetbol. La boliviana, nacida en Tarija, escaló al quinto lugar del mundo en este deporte, siendo una más de las atletas nacionales en marcar un hito en este depor-te.
Laime Jalil, quien actualmente representa a Colom-bia tras las malas condiciones y el poco apoyo a los deportistas en el país, sueña con volver algún día a representar al país. Para ello, ahorra para costear sus competencias y hacer posible este retorno.
Con un total de 810.5 puntos obtenidos en el Tour Profesional del Ráquetbol Femenino, Laime es quin-ta en el mundo, lista donde encabeza la mexicana Paola Longoria. La tarijeña consiguió un buen ascen-so tras sus pasos con éxito al ser finalista de dos competencias del Tour.
Al igual que María José Vargas y Natalia Méndez, quienes pese a representar a otro país (ambas están por Argentina actualmente), Laime mantiene comu-nicación con sus ex compañeras de selección.
Actualmente compiten dentro del Circuito Profesio-nal con Angélica Barrios, cruceña que sigue con los colores bolivianos.
Con estos éxitos, Laime nos contó su deseo de re-tornar y de sus éxitos.
—¿Cómo fue tu paso por Colombia, qué cosas resca-tas de tu experiencia?
—La verdad, fue muy bueno. He llegado a conocer cómo vive un profesional más que todo. Por un tiempo estuve viviendo con Mario Mercado, quien actualmente sigue representando a Colombia. Hubo apoyo, siempre me ayudaron con psicólogos, entre-nadores y gente que siempre estuvo al pendiente de nosotros. Hay mucho que rescatar, desde las perso-nas que he conocido y hasta dónde estoy ahora es por todo lo que pasé y la oportunidad que me die-ron ellos de jugar en el Tour Profesional, ayudán-dome con las inscripciones, con los vuelos. Estoy muy agradecida con ellos por todo eso.
—¿Qué se sintió competir por otro país, cómo te lle-vas con tus compañeros?
—Por un lado sentí mucha presión al inicio, porque una nunca quiere fallar y peor cuando toca repre-sentar a otro país. Siempre amé jugar al ráquetbol, darlo todo y también me llevé bien con los entrena-dores, mis compañeros y además con Cristina Ama-ya, María Paz Riquelme y Mario Mercado, quienes fueron las personas que me ayudaron en el proceso.
—¿Hay la posibilidad que vuelvas a representar a Bolivia?
—Amaría representar una vez más a Bolivia, pero no creo que sea posible por ahora, aunque hay que es-perar qué pasa en el futuro. No pasó nada con Co-lombia (sobre rumores de problemas con los ra-quetbolistas). Gracias a Dios me fue mucho mejor y si ahorro un poco más de dinero podría ya jugar los nacionales en Bolivia. Pasaron muchas cosas, por lo que me haría muy feliz por volver a representar a Bolivia.
—¿Qué se siente estar dentro de las cinco mejores del mundo?
—Es increíble, me siento muy bendecida y todo el trabajo está dando frutos. Quiero seguir haciendo lo que más me gusta: jugar al ráquetbol, quiero disfru-tar de mi familia lo más que pueda, terminar la Uni-versidad y ver qué pasa en el futuro. Es algo muy bueno y quiero ir escalando poco a poco.
—¿Jugarás en los Panamericanos?
—Por ahora no estoy pensando en esto, ya que me estoy enfocando más de jugar el Tour.
—¿Practicas otro deporte?
—Ahora estoy practicando pickleball, que es un de-porte que se está haciendo muy popular en Estados Unidos, justamente varias empresas que se dedican al ráquetbol están fabricando paletas para jugar. Me empezó a gustar este deporte, ahora voy unas cua-tro o cinco veces a la semana después de practicar el ráquetbol, en el futuro quiera entrenarlo a nivel profesional después.
—¿Los estudios y las competencias, cómo llevas am-bos?
—Es difícil, pero siempre hay tiempo para todo si sabes hacerte horarios. La verdad que facilita tener entrenadores en Bolivia, pero ellos están en otro la-do. Pienso en mi futuro profesional, es algo que quiero para mí y es por eso que ahora me quiero enfocar en eso. Intento no estresarme mucho en el ráquetbol, porque esto no es todo lo que tengo. Quiero sacar adelante a mis estudios, pero al final del día me siento bien con lo que hago. Busco que haya equilibrio.