Por Edgar Tejerina Casablanca
Muchos clubes no solo profesionales, sino también “amateurs” como los que juegan la Copa Simón Bolívar, están pasando una serie de penurias para cumplir con el sueldo de sus jugadores. La falta de dólares.
Y es que la falta de la moneda norteamericana, al precio oficial, no se encuentra sino es a un caprichoso precio que ponen diariamente las casas de cambio.
Los futbolistas, sobre todo extranjeros, exigen a los dirigentes a pagar esa mensualidad en dólares y entonces los clubes deben comprar los dólares del mercado negro duplicando el presupuesto de su planilla mensual.
Algunos dirigentes encontraron buena respuesta de sus jugadores, otros son firmes en exigir el pago en dólares y son pocos los clubes, que sin dificultad (como Bolívar) pagan con el billete verde.
Esta nueva preocupación de la dirigencia, distrae no solo el trabajo de ellos, sino también de algunos jugadores foráneos, que les anticiparon que en 2025 se quedarán en el club si solo reciben su paga en la moneda extranjera. Dicen que deben enviar sus recursos en dólares a sus países de origen donde viven sus familiares, y al comprar ellos, pierden casi medio sueldo.
En Bolivia se pagan muy buenos sueldos y por ello la llegada de muchos jugadores del exterior, algo que decidieron los dirigentes en la frecuente competencia de traer y tener a “figuras” que muchas veces son un fraude y desbancan a los clubes al irse impagos y cobrar sumas fuertes mediante la FIFA. El dólar puso en jaque a nuestro fútbol.