Se va o se queda… esa es la cuestión. El futuro del seleccionador, el brasileño Carlos Antonio Zago, lo decidirá el Comité Ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), aunque ya se advierten opiniones distintas.
“Debe irse, ese es mi criterio personal y la decisión final la debe tomar el presidente”, dijo Víctor Mansilla, presidente de la Comisión Organizadora de Competiciones de la FBF y su palabra tiene peso por que además fue designado vocero durante la realización de la Copa América.
Issac Mollinedo, presidente del fútbol paceño a su retorno de Estados Unidos donde fue invitado por la FBF, tibiamente sostuvo que “esta selección nos decepcionó y hay varios dirigentes molestos, pero como nos dijo el presidente (Costa) hay seguir adelante”.
Costas confirmó que viajaron a la Copa América seis presidentes de asociaciones y muchos otros de clubes profesionales.
Zago tras su fracaso en la Copa América, aguarda una decisión, decidió esperar tras expresar en una conferencia que “la decisión de irse o no, la toma la dirigencia”. Lo cierto es que él acató una instrucción y fue la de rejuvenecer el cuadro Verde sin un plan, con equipos de ensayo en la Copa, donde logramos un título en 1963 en Cochabamba y un subcampeonato en 1997 en La Paz.
Esta presencia de Bolivia en el importante torneo le generó un ingreso de 2 millones por parte de la CONMEBOL. Ya no son 4, pues se decidió entregar la mitad por su presentación y los otros 2 millones lo ganan al pasar de fase y Bolivia se aplazó de la mano de Zago con un equipo sin alma, sin jerarquía y sin amor a la camiseta.
“No, no puedo hablar de dinero”, dijeron a su turno Mansilla y Mollinedo como acogiéndose al silencio, sin embargo, Mansilla que parece romper la histórica unidad monolítica de las asociaciones, reveló que los futbolista demandaban un bono de 30 mil dólares. En el ítem de viáticos se dispuso más de medio millón de dólares para los 26 jugadores.
“Necesitamos un cambio, un gran cambio desde la actitud, hay que analizar, no es lo que esperábamos esta pobre actuación”, añadió Mansilla.
Antes los seleccionados cobraban un bono de presentación de mil dólares, pero cambiaron las exigencias de los capitanes y percibieron entre 20 y 25 mil dólares en las anteriores ediciones.