Por Betty Rojas (Invitada especial)
Rara vez cuando un deportista da positivo a un control antidoping asegura que tomó alguna sustancia de manera consciente e intencional, pero pese que el atleta pudo ingerir un medicamento por error para la Agencia Mundial de Antidopaje (AMA) el primer y único responsable por un caso positivo es el deportista, ya que es él quien en última instancia decide qué tomar o inyectarse.
“El deportista es responsable por cualquier sustancia que se encuentre en su cuerpo. Una violación potencial a una norma antidopaje ocurrirá tanto como si intenta el uso de una sustancia prohibida, como por su nivel de precaución. Siempre toma precauciones ante una sustancia, comida (especialmente carne en algunos países) o suplementos que estés consumiendo”, indica la AMA en una publicación de las preguntas más comunes sobre doping.
El último caso de doping positivo se registró en los Juegos Suramericanos Asunción 2022, con Vidal Basco, que tras un control se le encontró rastros de clembuterol, un medicamento que se usa para combatir enfermedades respiratorias y descongestionante, pero está en la lista de sustancias por sus características estimulantes y anabolizantes, porque aumenta la masa muscular y disminuye la acumulación de grasa.
Basco señala en su defensa que tomó el medicamento por error, porque no existía la prescripción que le recetaron y en la farmacia la ofrecieron una más fuerte, que para su mala fortuna contenía clembuterol.
Pero esta defensa para la AMA no es aceptada ya que porque asegura que el deportista debe asumir su responsabilidad en cuanto a qué tomo o se inyecta.
“Todos los atletas precisan ser proactivos al hacer preguntas a fin de no comprometer sus carreras deportivas. Si tienes una pregunta, ¡hazla! Si no puedes estar 100 por ciento seguro de los ingredientes o no conoces el estatus de una sustancia, ¡no la tomes!”, le dice la AMA a los atletas.
Sobre los casos de resfriado la AMA es clara al señalar que “si sufres de un resfriado, tienes gripe o alergia al polen, no tomes ningún medicamento ni sustancia sin haberte asegurado previamente que no contiene sustancias prohibidas. Esto incluye aquéllas vendidas sin receta médica y los medicamentos proporcionados por tu médico. Recuerda que un resultado positivo no tiene vuelta atrás”.
“Los atletas siempre deberían saber lo que ingieren. Utilizar medicamentos sin conocer su contenido puede dar un resultado positivo en el control de dopaje además de ser posiblemente peligroso para la salud”, agregó la AMA.
El deportista tiene la obligación de informar a su médico que es un atleta de alto rendimiento y puede ser sometido a diferentes controles antidoping.
Además si un deportista llegar a necesitar una medicación con una sustancia prohibido podría hacerlo y no tener problemas con los controles antidoping, pero para ello debe solicitar una Autorización de Uso Terapéutico (AUT).
“El programa de la AUT ofrece a los atletas la oportunidad de solicitar tratamiento de una condición médica seria, usando una sustancia prohibida. Una AUT sólo será otorgada si la sustancia no representa un problema significativo para la salud, no incrementa el desempeño y si no existe otra sustancia o método alternativo para el tratamiento”, señala la AMA.
En Bolivia las AUTs se solicitan a través de la Comisión Nacional Antidopaje (CNA).
Algunas de las sustancias que se encontraron en los controles realizados a los deportistas nacionales son la Nandrolona (Alison Sánchez en 2010), Benzoilecgonina (César Fernández y Juan Carlos Huiza en 2017), EPO-CERA (Óscar Soliz en 2017) y acetazolamide (Carolina Ocampo en 2018).
La Benzoilecgonina de cocaína es la sustancia más común encontrada en los controles en el fútbol profesional, además de los diuréticos.
Esta sustancia a veces fue encontrada en el organismo porque algunos deportistas practican la tradición del acullico de coca. Este fue el caso de César Fernández y Juan Carlos Huiza.